Sin ser una persona mayor era apodado como “el viejo del canottieri”. Tranquilo Capozzo se ganó ese dote gracias a su prematura calvicie. Pero ese no fue el único que tuvo, también le decían “el tano”, ya que pese a haber nacido en Estado Unidos, el 25 de enero de 1918, vivió en Italia durante gran parte de su adolescencia.
Llegó a nuestro país en 1936. Desde ese momento debió trabajar para mantener a su familia pero logró encontrar espacio para practicar deporte. Comenzó a pedalear y compitió varias veces con su bicicleta. En 1945 un dirigente del club Canottieri Italiani vio que su físico podía darle frutos en el remo y así fue como lo invitó a remar. Al poco tiempo era campeón argentino y sudamericano en single scull. Participó de los Juegos Olímpicos de Londres 1948, donde fue eliminado en semifinales.
En 1951 le dijo adiós al single y formó parte del doble scull para representar a la institución de descendencia italiana. Al principio no quería remar ese bote, ya que su compañero sería Eduardo Guerrero, quien era 10 años más joven que él y era visto como un chiquilín bohemio por Capozzo. Luego terminó aceptando la propuesta.
Con solo 6 regatas disputadas y 6 ganadas llegaron a los Juegos de Helsinki 1952 donde se consagraron campeones Olímpicos. Luego de esta competencia Capozzo entendió que era hora de terminar con el remo y se fue a vivir a Bolivia durante una década. Al regresó se alojó en Vaquerías sobre las Sierra de Córdoba.
Su último deseo antes de su muerte, el 14 de mayo de 2003, fue que sus restos fuesen arrojados al río Luján, Tigre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario